¿Volverán las oscuras golondrinas?

BÉCQUER 2020

¿Volverán las oscuras golondrinas
con la nueva anormal normalidad,
o tendremos tan sólo más pamplinas
y menos libertad?

¡Dios sabrá la verdad!

¿Volverá la tupida madreselva
cuando el virus del miedo nos corona,
o tal vez asfixiando nos envuelva
en una sociedad que se acojona?

¡Dios sabrá la verdad!

¿Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar,
o sólo escucharemos los gruñidos
de una casta política vulgar?

¡Dios sabrá la verdad!

... Pero mudo y absorto y de rodillas,
confinado, sin voz, con un bozal,
como no te he querido... Desengáñate,
¡así no hay libertad!

Jesús María Bustelo Acevedo

La Bandera

LA BANDERA

El sufrimiento animal
es rojo y es amarillo
y se le evoca en el brillo
de la insignia nacional.

El amarillo es el oro
de la codicia mundana;
y el rojo, sangre que mana
de algún maltratado toro.

Un gualda que guarda el mal
del ojo por ojo en la hoja
de la espada criminal,
y un rojo que es manantial
de sangre inocente y roja
en la que siempre se moja
el pabellón nacional.

Bandera de esta nación
donde el mundo entero arde,
violenta, vil y cobarde
como cualquier pabellón...
De banderas, ¡Dios nos guarde,
que del César todas son!

Jesús María Bustelo Acevedo

Jugar con fuego

¡LA CULPA ES TUYA, LUCIFER!

La culpa es tuya, Lucifer,
porque prendiste las hogueras
para arrasar las primaveras
de la mujer
y todo lo que ella pariera.
Jugar con fuego
con el que luego dice digo
en donde antes dijo Diego
convierte al fuego en enemigo
y hace un infierno del Edén,
con Lucifer, sin Fe ni Luz,
sin la Verdad del que delante
entra en Jerusalén triunfante,
sin su Pasión,
sin su Aleluya,
sin su partida en esa Cruz,
sin su inmortal Resurrección...
¡La culpa, Lucifer, es tuya!

Jesús María Bustelo Acevedo

¡Para ser un buen soldado hace falta un soldador!

LOS QUE SE SUELDAN A SUELDO

Para ser un buen soldado
hace falta vocación,
despreciar al corazón
y a cuantos se haya matado
en nombre de tu nación.
Hay que estar formateado,
sumiso y disciplinado,
y aportar al batallón
tu cerebro uniformado.
Y no ser la vida pura
que puso Dios en la Tierra,
sino tornarla en la guerra
que toda la vida entierra
movida por la locura...
Es un mal...
¡pero es legal!
Y el Reino que no es del mundo,
¡para el tonto y vagabundo
Salvador universal!

Jesús María Bustelo Acevedo

Un circo que alegraba siempre el corazón

UN CIRCO LLAMADO ESPAÑA

Había una vez un circo,
un circo llamado España,
con regiones, regidores,
equilibristas y patrias,
con leones y Castillas,
y con urnas y con jaulas,
con animales salvajes
y toda la fauna humana,
trampucheros, trampecistas,
cortes, gobiernos y carpas,
con domadores de fieras
y fieras que se desmandan,
ilusionistas e ilusos,
payasos y papanatas,
con público y electores,
amazonas y amargadas,
con mili y con Milikito,
con tracas y con matracas,
Charlie Rivel, charlatanes,
bulos, velos y hombres bala,
funciones y funcionarios,
y números y palabras...

Había una vez un circo,
un circo llamado España,
que alegraba corazones
y las mentes apenaba,
con lágrimas y sonrisas,
con tragedias y con magia...
Circo que tiene su fin
igual que tiene su entrada.

Jesús María Bustelo Acevedo

Elecciones Andaluzas

ELECCIONES EN ANDALUCÍA

¡Elecciones Andaluzas!:
¿Turina o Manuel de Falla?
¿Sierra Nevada o la playa?
¿Caballitas o merluzas?

¿El pito chirigotero
o la sobria procesión?
¿La máscara o el mantón?
¿Murillo o Julio Romero?
¿Federico o Juan Ramón?

¿Bulería de Jerez
o Alegría gaditana?
¿La Roldana
o Martínez Montañez?

¿Córdoba con su Mezquita
o la Alhambra de Graná?
¡Qué más da!
¡A mí nadie me los quita!

Que si es, como Hamlet dijo,
ser o no ser la cuestión
y no lo que, siendo, elijo,
¡poco importa la elección!

Jesús María Bustelo Acevedo